En Whitfield Street se encuentra uno de los lugares más encantadores de Londres. Es un museo de juguetes en el que se puede admirar toda la gracia y el ingenio de la industria juguetera victoriana. Soldados de plomo, carruajes de hojalata y, sobre todo, teatrillos de cartulina recortables que, además, se pueden adquirir como recuerdo, son algunos de lo cientos de ejemplares expuestos.